Tal como avanzamos ayer en el programa de Twitch, ya es oficial: Mateo Sciancalepore abandona el RCD Espanyol y jugará esta temporada en el Elche Ilicitano, filial franjiverde.
El conjunto blanquiazul y el club ilicitano han llegado a un acuerdo que incluye que el Espanyol se reserve un porcentaje de una futura venta del jugador, además de poder percibir bonus económicos en función de su rendimiento.
El propio Mateo Sciancalepore quiso despedirse del Espanyol con una emotiva carta publicada en sus redes sociales. En ella agradeció “a toda la gente del club, compañeros, entrenadores, asistentes, preparadores, fisios, médicos, delegados y personal de oficinas, por haberme hecho crecer como jugador y como persona”. También tuvo palabras para Ramón Guerrero, director de la residencia del club, y para todos los trabajadores que le acompañaron en estos años, destacando su “dedicación y profesionalidad”. El delantero aseguró marcharse con la tranquilidad de haber “defendido y representado este escudo con pasión y sentimiento”, y concluyó que, aunque sus caminos se separen, “el Espanyol siempre irá conmigo”.
Una etapa marcada por la falta de minutos
El delantero, que renovó hasta 2028, no tuvo la oportunidad de disputar minutos oficiales la pasada campaña, una situación que acabó precipitando su salida. Ahora, Sciancalepore buscará reencontrarse con su mejor versión en el filial del Elche.
De lateral a delantero centro
Sciancalepore llegó al Espanyol en 2020 procedente de la Damm para incorporarse al Cadete B. En sus primeros pasos jugaba como lateral izquierdo, pero bajo la dirección de Julián López de Lerma reconvirtió su posición a la de delantero centro. La pasada temporada cerró su etapa juvenil y este verano estaba realizando la pretemporada con el Espanyol B.
Con esta salida, el futbolista argentino encara una nueva etapa con la esperanza de consolidarse en el fútbol profesional y confirmar el potencial que mostró en su formación en la Dani Jarque.